Vaya si lo será. Las razones son múltiples pero sin duda hay que destacar el lugar elegido; la inversión realizada; la visión y pasión de un hombre y su equipo, que han hecho de un pueblo olvidado del interior del país, nuestra mejor carta de presentación en el mundo entero. Bodega Garzón y el conjunto de su emprendimiento han revitalizado la zona. Los reconocimientos son buenos y bienvenidos. Para los hacedores y también para el país, como productor de vinos que es

La prestigiosa  revista estadounidense Wine Enthusiast, especializada en el sector vitivinícola, reconoció a Bodega Garzón como Best New World Winery of th Year, en una de sus categorías del premio Wine Stars Awards. Muchas son las que la revista distingue cada año, entre ellas: mejor bodega de Estados Unidos, mejor bodega Europea y las de otras regiones, figuran en la del Nuevo Mundo del Vino. Garzón este año compitió con Cave Springs Cellars (Canadá), Felton Roads (N. Zelanda), L’Avenir (Sudáfrica) y Trapiche (Argentina). La innovación, visión empresarial  y su estrategia de sustentabilidad, sumaron a la hora de elegir a Bodega Garzón, frente a las otras cuatro. Enhorabuena!

Christian Wylie, chileno y casado con una uruguaya, es el gerente general de Bodega Garzón desde 2016, entrevistado por los medios declaro: “desde el punto de vista técnico, Garzón está ubicado en la misma latitud que los grandes viñedos del sur del planeta. Se ubica en un lugar con una energía y magia especial, al que se le suma el suelo de balasto, dando a sus vinos una complejidad natural incomparable…, tengo 30 años en la industria, he recorrido el mundo y en ningún lado he visto un desarrollo tan espectacular como este”.

El galardón de Wine Enthusiast señala como puntos destacables no sólo la calidad de sus vinos y su localización pionera, a poca distancia del Océano Atlántico, en una región que ofrece prometedoras perspectivas para la viticultura uruguaya. Afirma con orgullo el enólogo residente Germán Bruzzone “Nuestras vides crecen en un suelo muy especial, compuesto en gran parte por un granito antiguo y semi disgregado, conocido como balasto”.

Un suelo tan especial da origen y nombre al tinto icono del Ing. Bulgheroni. BALASTO es como se conoce dentro y fuera de fronteras este vino de colección. Su primera cosecha fue presentada en sociedad, el 12 de setiembre de 2017. Esa fecha ha quedado institucionalizada para presentar cada año, una nueva edición. Así fue como el pasado setiembre se presentó la cosecha 2016.

También la hicieron merecedora de este premio, el ser la primera bodega en el mundo, en certificarse por el sistema LEED (Leadership in Energy & Environmental Design). Esta norma destaca la eficiencia energética y el desarrollo sostenible de los espacios internos y externos de los edificios industriales. Es dada por el US Green Building Council, que reconoce a las empresas que realizan una positiva contribución, a la mejora global en el impacto al medio ambiente.