Pazo Barrantes es una original bodega gallega del Valle del Salnés, se destaca entre las de la región, porque produce únicamente dos Albariños de alta gama, a esta altura ya considerados como icónicos

Así lo destacan los diversos medios especializados de España. Es que en Galicia, la mayoría de sus varietales no se ubican en esta categoría, ya que se producen sin crianza y para ser consumidos durante el primer año de vida. Por supuesto a precios que en general rondan los 10 euros.

Es particular o especial también por su historia que data del siglo XVI, siempre vinculada a la familia de Vicente Cebrian-Sagarrigas quien la conduce junto a su hermana Cristina. Ellos tomaron la drástica decisión en 2009, de dejar de elaborar vinos sin alma, para elevar la mira hacia una categoría superior y que los diferenciara de la media regional.

Además de Pazo Barrantes, la familia Cebrian también es propietaria de otra bodega de mayor tamaño – Marqués de Murrieta – en la DO Rioja. En ella trabaja nuestro compatriota, el sommelier Federico de Moura y nada mejor que para esta nota, tener sus comentarios.

Una opinión que vale lo que pesa

“Vicente es un crack, no para de encarar nuevos desafíos. Termina un proyecto y comienza otro. Es muy amigable y para nada distante, me entrevistó cuando me postulé para el puesto”, comenta Federico.

Por supuesto que en su cargo de Hospitality Manager en la bodega riojana, él conoce bien los Albariño gallegos de la familia, porque los sirve y los comenta para los comensales del restaurante en el castillo Ygay.

“El Pazo Barrantes, con el mismo nombre de la casa, salió al mercado en 2019, en una versión bien contemporánea. No sólo se destaca por su fracción mineral y la salinidad clásica del Valle del Salnés, también por su potencia aromática y su equilibrio, sin la acidez punzante que caracteriza a la mayoría de los de esa zona”, dice De Moura.

En cuanto a La Comtesse – un homenaje a la condesa viuda de Creixell, madre de Vicente – es un vino que rompe los moldes. Nunca antes se había elaborado un Albariño con tanto tiempo de crianza: un año en barrica, otro en tanque de concreto y dos años en botella antes de salir al mercado”, agrega.

“Los dos se consideran de los mejores Albariños de España, por todos los comentaristas de vinos. Son palabras mayores.  La Comtesse es un vinazo, muy gastronómico, sólo se elaboran 8.000 botellas, que se venden según la cuota que la bodega otorga a cada cliente”, suma y sigue Federico.

Elogios no faltaron

Ni que decir que coincido totalmente con la opinión de Federico, muy diferentes los dos, pero ambos de una categoría excepcional.

La semana pasada en ocasión de la presencia de Alejandra Naranjo, export manager de la bodega Pazo Barrantes para las Américas, pude degustarlos en la Iberhouse del Shopping Punta Carretas.

Leo Guerrero, brand ambassador de Iberpark organizó la cata, invitando también a varios sommeliers profesores de la Escuela Gato Dumas. Ni que decir que los elogios fueron unánimes.