Tan cerca de la Navidad y con el verano ya instalado, muchos ya están comprando las bebidas que ayudaran a disfrutar de las fiestas y la playa. Y los cocteles están esperando a ser llamados para entrar a la cancha. Porque el plantel se integrará con nuevos jugadores, diferentes a los del invierno que los exigió más potentes o más alcohólicos

Es la época de los ligeros, los que combinan a los espumantes con las frutas y muy probable es que el capitán del equipo sea el tradicional Bellini. Una legendaria creación del famoso Giuseppe Cipriani, quien hace más de medio siglo tuvo la feliz idea de combinar la pulpa licuada de duraznos, con el prosecco del Piamonte. Lo bautizó con ese nombre, en honor al pintor Giovanni Bellini y lo convirtió en la especialidad del Harry’s Bar de Venecia, lugar muy frecuentado y favorito de Ernest Hemingway y Orson Welles. En cambio si al anterior se le cambia el durazno por jugo de naranja y en vez de prosecco, se usa un espumoso en una proporción 50/50, en las barras de los bares se le llamará Mimosa. Se prepara directamente en la copa flauta y mejora si antes de agregar sus ingredientes, se enfría la copa apenas unos minutos en el freezer.  Otro infaltable, muy fácil de preparar y bastante frecuentado por todos en la Noche Buena, es el de helado de limón bañado con un espumoso que bien puede ser Brut o Demi Sec, si se lo prefiere más amable.

El vino también pide lugar

Un nuevo jugador se ha integrado al equipo principal y los cocteles hoy incluyen al vino, que con buenas credenciales disputa ser titular. José Adolfo Burger, sommelier en funciones para Familia Deicas, prepara una excelente caipirinha con el Atlántico Sur Sauvignon Blanc, con el que baña la infaltable lima, más una pizca de azúcar y hielo picado, no le agrega ningún destilado.  Otro muy original fue servido en Bodega Garzón antes del almuerzo, a un grupo de turistas brasileños al cual acompañamos en su recorrida por las bodegas locales. Los vasitos llegaron a la mesa anunciados como gin tonic, pero su color no correspondía al clásico. Mezclado con los trozos de hielo y una rodaja de pepino, el líquido se veía rosado oscuro y por supuesto que  cundió la intriga entre los comensales. No tardaron en llegar las preguntas al mozo, quien muy conciso explicó su composición: “contiene además de hielo, agua tónicay gin, un toque de vino tinto porque estamos en una bodega”. Grata sorpresa. Se apreciaba un gin muy suave, combinado con el aroma del pepino y el amarguito de la tónica. El tinto sólo  intervenía con su color para hacerle honor a la casa. Viniendo de Maldonado a Canelones, no hace tanto que la Somm. Antonella de Ambroggi se ha hecho cargo del turismo en la Antigua Bodega. Para recibir a los visitantes ella prepara un trago con el Dolce Donna, un blanco de cosecha tardía. Lo condimenta con cáscara de naranja, un toque de Campari y una ramita de romero para mejorar su perfume. Otras veces cambia de registro y sirve a manera de copa de bienvenida, el Bella Donna Rosado Blush con hielo y menta. Muy simple y una buena sugerencia que nos aporta, para sorprender a la familia este verano.

El coctel simulado es sin alcohol

‘Mocktail’ es la suma de las palabras ‘mock’ (imitar o simular) y ‘cocktail’. Así se les llama a los  que no contienen alcohol. Hasta hace bien poco se presumía que todos debían llevarlo, pero los tiempos cambian y las costumbres también.  Se han convertido en tendencia y son la elección de las personas que van a conducir, de las mujeres embarazadas o que están dando lactancia materna y otros como las personas que tienen prescripciones médicas o sencillamente son abstemios. Fáciles de preparar y con infinidad de variaciones, sus ingredientes principales son frutas y jugos, aunque también se utilizan helados. Son bajos en calorías y además aptos para todos los públicos. A diferencia del cóctel clásico, la base de algunos  que triunfan son  las frutas exóticas y en ocasiones, hasta bebidas como el chocolate o el café y el té fríos. Por su parte, los ‘mocktails’ con vocación altamente energética pueden llevar jugo de granada, una fruta que algunos consideran como un superalimento. Sin dejar de lado los elaborados con una fruta como el Açai, que ostenta el récord de antioxidantes.

Hay de todo en la viña del Señor y eso ayuda mucho, para permitirnos el diseño de los tragos propios y originales del próximo verano.