El vivero en Francia, ubicado en Blaye, Côtes de Bordeaux, es la primera ocupación de Jean Pierre Bouillac. Desde los años 60 la familia lo trabaja para suministrar plantines a los viticultores de esta gran región de Aquitania. Blaye es una Denominación de Origen cercana al océano, con distintos tipos de suelos, algunos certificados para generar uvas de calidad y vinos con la marca de la DO. Otros, en cambio, en los que abundan las arenas negras, no son reconocidos para esta finalidad, pero también se utilizan

Es el caso del vivero de la familia Bouillac, que según Jean Pierre, las arenas negras del suelo suman una ventaja: “Mi padre comenzó como viverista en los años 60 y yo me integré en 1983, al completar mis estudios de viticultura y enología. A una empresa pequeña como era entonces, se le hacía difícil competir con las más grandes y prestigiosas. Mis padres ya tenían una pequeña producción de espárragos y tuve la chance de hacerme cargo de la misma. El tipo de suelo y la abundancia de agua surgente, es ideal para obtener una calidad superior para este cultivo. Apoyado en esta condición, entré como proveedor de espárragos de la cadena Carrefour, lo cual le dio un gran impulso al negocio familiar”. Obvio que siempre le gustaron los buenos vinos y se dio cuenta que los iba a tener si contaba con su propia bodega. También le iba a permitir experimentar con los diferentes clones que su vivero producía:”Como vendedor de plantas, esta experiencia personal me ayudaba a reforzar mis gestiones de venta de plantines. Con el tiempo, hoy tengo en Francia 100 hectáreas de viñedos en producción, cosa que no es fácil en mi país. La bodega se fue construyendo en etapas. Hoy es una instalación grande, equipada con tecnología de punta y mis vinos se venden con el sello de la DO Blaye, Côtes de Bordeaux”.

Uruguay lo precisaba

Jean Pierre se maneja bien en español, lo habla con fluidez y cuando una palabra se le escapa intercala una pausa. Con una sonrisa compensa el lapso y usa el francés para decirla. De su llegada a Uruguay cuenta: “En 1996 estaba en mi stand en la VINITEC – Burdeos y un empresario uruguayo vino a verme varias veces y a contarme, de la reconversión de viñedos que acontecía en su país. Al final me convenció que en Uruguay habría un buen negocio para mi vivero.  En enero de 1997 tomé un avión, vine a conocer esta nueva realidad y antes de volver a Francia, ya había decido instalarme. Para ello me asocié con Pedro González y Omar Perco, ambos con vasta experiencia en el tema  y así comenzó mi operación en Uruguay”.

Es aquí donde todo comienza

Este es el lema del vivero Centro Vitis de Jean Pierre, ubicado en Canelones. Lo administra el Enol. Pedro González, quien cuenta sobre la operativa:” El material vegetativo proviene del viñedo Centro Vitis en Villa El Carmen, de Durazno. Es el viñedo madre, con plantas que deben tener un estado sanitario perfecto como primera condición. Deben ser también de clones reconocidos y bien identificados, para poder multiplicarlos. La prioridad es la producción vegetal y no la de uvas. Allí tenemos más de 35 variedades, que pueden parecer muchas para el mercado uruguayo, pero que en Brasil tienen mucha demanda. Es un mercado que nos importa, al que exportamos cada vez más y allá, a diferencia de aquí, hay una marcada preferencia por las variedades italianas como la Ancelotta, Nerbbiolo, Prosecco o Teroldego. O sea, se trata de un banco genético muy importante, con muchos clones diferentes para cada variedad. En Tannat tenemos la mayor diversidad en Sudamérica y de Pinot Noir por ejemplo, podemos ofrecer hasta 9 clones diferentes”.

Un Ceibo en las etiquetas

De todas maneras, del viñedo de El Carmen se genera una reducida producción de uvas que hay que aprovechar. Con ellas ya se están haciendo tintos de corte, en la bodega de la familia Marichal. Con ellos se realizó un acuerdo y se ubicó un espacio para instalar los equipos propios. Se importaron tanques de fermentación y los recipientes de plástico poroso, donde se hace la crianza de los tintos de guarda. El pasado jueves 5 se realizó la presentación de los mismos, en el Club Piso 40 del Montevideo World Trade Center. Titina Núñez, Msc in Wine Management,  creadora y editora de Placer Magazine, tuvo a su cargo la organización de la cena, en la que participaron sommeliers, periodistas y docentes del sector, así como el presidente de INAVI y el embajador de Francia. Cada plato fue acompañado por los vinos nacionales y franceses, de este pujante empresario que no dudó en venir al Uruguay a invertir y agregar valor a nuestra producción vitícola.