Aunque el 8 de marzo ya pasó, su eco aún resuena para todos. Me gustó entonces destacar tres vinos, que fueron pensados y elaborados bajo la atenta mirada de jóvenes enólogas. A ellas les toca contarnos cómo los hicieron

Protagonista 2020 – Antigua Bodega

La Enol. Mariana Meneguzzi Stagnari, lleva ya algunos años elaborando vinos en Antigua Bodega, junto a su colega Laura Casella. Aprovechando la generosa cosecha 2020, ambas decidieron crear un nuevo tinto de corte, bien novedoso y que sin dudas, se diferencia de los más clásicos.“La sanidad de la uva fue este año tan superior a otros, que la tentación se hizo irresistible” comenta Mariana y agrega:“A medida que llegaba la uva a la bodega, nos íbamos entusiasmando. La primera en entrar fue la Syrah, seguida por la Marselan y la Cabernet Franc, las tres de calidad inmejorable”. Esta circunstancia hizo nacer al Protagonista, combinando una tercera parte de cada una y con la decisión de no utilizar la crianza en roble, para que la fruta resaltara e hiciera honor al nombre en la etiqueta. Fue una buena idea, porque la tendencia actual, al contrario de lo que sucedía en los años 90 y a principios de este siglo, es disminuir la incidencia de la madera, para que la fruta pueda expresarse. “Así logramos un vino que habla desde el viñedo. Porque si bien la madera ayuda y  esto es incuestionable, elaborarlo sin ella representa un desafío” agrega Mariana. De color bien guindo, muy atractivo, ese que tienta y despierta el deseo de apurar el primer sorbo, es perfumado, pleno, redondo y maduro en la boca. No parece un tinto joven y de la cosecha pasada. Da gusto paladearlo y es sin duda un muy buen logro de Mariana y Laura. Su precio aproximado es de $890

Margarita 2020 – Favretto Dragone

A Agnese Favretto egresada en 2011 de la Escuela de Enología – le gusta experimentar con las uvas del  viñedo familiar y la bodega le da una posibilidad, que ella no duda en aprovechar.  Al terminar sus estudios hizo una pasantía en Constellation Wines de California y también en Villa María Winery, una importante empresa de Nueva Zelanda. Más allá de los clásicos varietales de uvas francesas y con el apoyo decidido de su hermana Lucía, encaró hacerlos de diferentes cepajes. Así nació un rosado Isabella, de una uva que todos conocemos y la llamamos chinche o brasilera, clásica de los parrales en las quintas montevideanas de Colón o El Prado. Con la Moscatel de Alejandría elaboró este blanco Margarita, una variedad muy versátil que como todas de la gran familia a la que pertenece, ostenta un aroma dulzón muy entrador y cautivante. En la etiqueta posterior de la botella, se explica su nombre: “Margarita  llamábamos a la Nonna, que para quienes la conocimos, siempre andaba entre las piletas, los barriles o cargando el camión y haciendo el reparto. Sin embargo los clientes la conocían como Margara”.  Es un blanco sabroso y fácil de beber, sobre todo si se le sirve bien frío y que tienta mucho por su precio tan provocador: Cuesta $ 235 en Almacén de vinos Las Croabas.

Tannat Rosé 2020 – Ariano Hnos

Ya hace tres años que a la Enol. Sabrina Ariano le tocó subrogar, al Ing. Daniel Blah en la bodega de su familia. De mi parte, elegí este rosado para comentar hoy, porque me lo elogiaron y lo justifico. Quise saber sobre su elaboración para comentarlo. “Desde siempre, nuestro rosado se hizo con Tannat, porque se vende aquí y también lo exportamos a Brasil, donde nuestra cepa emblema resuena con fuerza. Antes se hacía con una maceración larga de las uvas y su color era mucho más intenso, pero eso hoy ya no se estila para los rosados”. Sin duda ha sido una buena decisión, porque ahora la tendencia los pide más claros y más elegantes, en sintonía con la tonalidad de los prestigiosos de la Provence, en el sur de Francia. Sabrina al igual que muchos jóvenes enólogos, también hizo una pasantía, pero ella eligió ir a la Toscana. Un amigo, enólogo y compañero de la escuela – Joaquín Bosca – le gestionó una pasantía en la bodega en la que él trabaja. Castello di Bossi queda a 20 minutos de Siena y durante tres meses estuvo participando de toda la vendimia. “Es una bodega bastante chica en la que compartí mi trabajo con otro enólogo de Nueva Zelanda y con el cual hicimos una gran amistad”. Por ser de Tannat y ya se sabe, no explota en aromas, pero en boca tiene muy buen cuerpo y eso justifica elegirlo. Además su precio es por demás conveniente. Se vende a $ 215 en Las Croabas – Rivera 2666 esq. Brito del Pino