Dulce pero no tanto

Bodega: Bouza Bodega Boutique
Origen: Las Violetas, Canelones
Precio: $ 525

Decir Tempranillo es decir España, donde la cultivan unas 28 Denominaciones de Origen. Y es bastante obvio que su nombre deriva de su ciclo vegetativo, que la lleva a madurar más temprano que otras uvas tintas. Este factor es determinante para convertirla en la variedad emblemática de la península Ibérica.

Hoy se cultiva en muchos países – Portugal, EE.UU, Argentina y Chile – y se la conoce por este nombre. Pero no sucede lo mismo en su tierra natal, porque en Cuenca la bautizan Cencibel, Escobera en Badajoz y Ull de Llebre en Cataluña.

No hace tanto que llegó a Uruguay y hasta ahora son pocas las bodegas que la adoptaron. Bouza la emplea para un varietal tinto, para el Monte Vide Eu y para este rosado, del cual nos habló Eduardo Boido, director técnico de la bodega.

“Comenzamos a elaborar rosados en 2009, siempre en partidas pequeñas y usando barricas de roble desde el vamos, algo original para la época. Elegimos esta uva porque presenta menor alcohol en potencia y esta cualidad nos pareció buena para un rosado. Pero 2016 fue un año muy especial. El alcohol potencial en las mayoría de las uvas fue bastante alto y sin dudas el mayor que recuerdo en el Tempranillo, desde que lo elaboramos. O sea que sus 14,5% de alcohol y sus 10 gramos de azúcar residual, son una característica de ese verano y te diría que opuesta a cómo se comporta en general el Tempranillo”, puntualizó Boido.

Lo descorchamos un domingo al mediodía para acompañar unos tallarines caseros con salsa de tomates perita, condimentada con romero, albahaca y un aporte final de aceitunas negras, apenas para calentarlas. Anduvo a la perfección.

Tiene mucha fruta en nariz, también en boca donde la acidez le da mucha frescura, a pesar de su grado alcohólico elevado, pero sobre todo mucho cuerpo, lo que llevaba a retenerlo un rato en boca para disfrutarlo mejor. En la etiqueta se lee claramente Dulce Natural, como forma de advertir al consumidor que no es un vino seco. Sin embargo con la pasta dominguera funcionó de perillas.

Fuente: Eme de Mujer