El miércoles 31 en la embajada argentina, se presentó el Malbec Single Vineyard 2014 de Familia Deicas. A partir de un pequeño y veterano viñedo mendocino, se elabora este tinto de gran calidad y muy buena relación calidad precio

Fernando Deicas contó a los presentes la historia de esta aventura cordillerana:

“Conocemos muy bien Mendoza, donde tenemos muchos amigos enólogos y bodegueros, por haberla visitado por más de 30 años. Hemos ido a comprar equipos de última tecnología y a verlos funcionar. También a consultar enólogos y por supuesto a degustar sus vinos. Poco a poco se nos fue instalando la idea de hacer vinos allí, pero con la impronta de Familia Deicas. Todo un desafío si uno piensa que nuestra experiencia es la de un clima húmedo, más parecido a los europeos de Burdeos o Borgoña. Como Uds saben, Mendoza es un desierto, que tiene la magia de la gran madurez de las uvas en la planta, que se traduce en vinos que a los 2 o 3 años ya tienen una evolución más que satisfactoria. Pero nosotros apuntamos a una vida más larga, un vino que pueda alcanzar su plenitud a los 10 años”.

“Para ello necesitábamos un viñedo muy veterano, cuyas vides nos dieran las uvas que tienen la virtud de dar un vino de mucho potencial de guarda”.

“No fue fácil encontrarlo pero dimos con un viñedo de 7 hectáreas, de un Malbec registrado en 1923 cuando se creó el registro del Instituto Nacional de Viticultura. De esta manera pudimos concretar el sueño de contar con nuestro propio viñedo mendocino”.

“Hecha esta introducción le dejo a Santiago que explique la elaboración de este Single Vineyard Malbec 2014”.

Por su parte Santiago Deicas nos contó que la elaboración del vino se realiza en Viña Cobos, propiedad de Paul Hobbs, un reconocido enólogo internacional que asesora a Familia Deicas desde hace años.  Con la participación de los técnicos uruguayos se controla la vinificación desde el comienzo tratando de intervenir al mínimo, para que la fermentación transcurra sin tropiezos. De esta manera decía Santiago, “obtenemos un Malbec típico pero más fresco que lo habitual porque tiene una acidez superior a los que conocemos. Esta característica es lo que nos permite lograr un vino que luego de varios años, nos siga deleitando sin el menor atisbo de decadencia”.